El famoso actor de doblaje estadounidense, James Earl Jones, falleció a los 93 años en su casa en Nueva York. A lo largo de su carrera, Jones enfrentó y superó prejuicios raciales y una severa tartamudez, convirtiéndose en un icono del teatro y el Séptimo Arte. Ganador de un Globo de Oro, dos Emmys, dos premios Tony, un Grammy, la Medalla Nacional de las Artes y otros reconocimientos, Jones también prestó su voz a personajes emblemáticos como Mufasa y Darth Vader.
Desde sus inicios en Broadway en 1958, Jones destacó en el teatro, la televisión y el cine, recibiendo elogios por su dominio de Shakespeare y de obras contemporáneas. Su actuación en ‘La gran esperanza blanca’ en 1970 lo llevó a la fama, y obtuvo una nominación al Oscar por su interpretación en la adaptación cinematográfica. A lo largo de su vida, Jones demostró su dedicación al arte escénico y su pasión por contar historias.
Nacido en Mississippi en 1931, Jones superó desafíos desde temprana edad, enfrentando una mudanza a Michigan y una dificultad para hablar a causa de la tartamudez. Con la ayuda de un profesor de secundaria, recuperó su voz y se lanzó a una exitosa carrera como actor. En Nueva York, junto a su padre, trabajó arduamente para abrirse camino en la industria del entretenimiento.
Jones tuvo dos esposas, ambas actrices. En 1967 se casó con Julienne Marie Hendricks, y tras su divorcio, contrajo matrimonio con Cecilia Hart en 1982, quien era reconocida por su papel en el drama policial de CBS ‘Paris’ y falleció en 2016. Fruto de su segundo matrimonio nació su hijo, Flynn Earl, en 1983.
El director Kenny Leon elogió a Jones, afirmando que no se puede encontrar un artista que haya servido más a Estados Unidos. A pesar de su tartamudez, Jones confiaba en que su arte podría influir en la sociedad. «Desde el principio me di cuenta de que no se puede cambiar la opinión de nadie, pero sí se puede cambiar su forma de sentir», expresó en una entrevista con la agencia AP.
Jones deja un legado imborrable en el mundo del cine y el teatro, siendo recordado por su talento, su carisma y su dedicación al arte. Su influencia se refleja en generaciones de artistas que lo admiraron y se inspiraron en su trabajo. Numerosos colegas y seguidores han lamentado su partida, recordando su impacto duradero en la industria del espectáculo.