Una controversia ha surgido en el País Vasco debido al uso de armas blancas. Según Montse Ávila, Maialen Larrinaga y A. Arrubarrena, llevar un cuchillo y amenazar a alguien no es motivo suficiente para ser detenido, ya que la ley exige contacto físico para que esto ocurra. En Álava, la Ertzaintza está cumpliendo estrictamente esta normativa, lo que ha generado un debate.
La Ertzaintza está confiscando un promedio de tres navajas al día en la región. El Consejero de Seguridad, Bingen Zupiria, ha informado que durante el año se han decomisado más de 500 armas blancas, especialmente en áreas de entretenimiento donde la gente porta objetos peligrosos.
A partir de ahora, los agentes de Álava no podrán detener a quienes lleven armas blancas en la mano a menos que haya un contacto físico o una agresión directa. Según Aner Uriarte, juez decano de Bilbao, exhibir un arma sin hacer nada más sería considerado un delito leve, aunque calificar esto sin analizar las circunstancias es arriesgado.
Esta medida ha generado descontento entre una parte de los agentes, ya que podría influir en su seguridad al no contar con respaldo en caso de intervención. El objetivo principal de la nueva normativa es evitar denuncias por detención ilegal y se espera que los cacheos preventivos sean aumentados para prevenir situaciones de riesgo.