Durante una entrevista en CNN en Español, el presidente de la República, José Raúl Mulino, expresó su rechazo a una posible intervención militar en Venezuela y enfatizó en la importancia de buscar soluciones mediante la democracia, el diálogo y la participación.
Mulino manifestó su disposición a ofrecer un refugio temporal a Nicolás Maduro como un puente para facilitar una transición hacia otro país, aunque reconoció que el pueblo panameño no aceptaría su presencia de manera permanente.
A pesar de no mantener comunicación con Maduro, Mulino considera que es un momento propicio para negociar y abordar temas delicados como los derechos humanos, destacando su experiencia ministerial en seguridad y la complejidad de la situación en Venezuela.
El presidente convocó a una reunión con 17 mandatarios de la región para abordar la crisis en Venezuela, pero no pudo confirmar si la misma se llevará a cabo en República Dominicana durante la toma de posesión del presidente Luis Abinader, ya que esto dependerá de la agenda del mandatario dominicano.
Mulino hizo referencia a la crisis que enfrentó Panamá en 1989 y cómo la solidaridad de Venezuela en esa época influye ahora en su postura a favor de la democracia en el país vecino, con el objetivo de evitar que la historia se repita.
Aunque reconoce la dificultad de establecer un canal de comunicación en Venezuela debido a la voluntad popular expresada en elecciones, Mulino considera esencial mantener el tema de la crisis en la agenda de las cumbres y discusiones internacionales.
Finalmente, el presidente abordó el problema de la crisis migratoria, especialmente en la peligrosa selva de Darién, donde muchos venezolanos se ven obligados a desplazarse en busca de una mejor calidad de vida.